Ubicado en el corazón del parque natural de Cazorla y rodeado de un paisaje de tremenda belleza, con una cuidada arquitectura perfectamente integrada en el entorno y una cálida decoración, este hotel ofrece una agradable estancia en contacto con la naturaleza, sin renunciar a la comodidad. Las habitaciones son todas exteriores con terraza y vistas espectaculares a la sierra. El establecimiento dispone de una gran piscina acondicionada para niños y adultos, un salón social acogedor de estilo rústico, salones para celebraciones y una zona ajardinada que se funde con la naturaleza que la rodea. El restaurante y la cafetería ofrecen platos típicos de la región. Son múltiples las actividades que pueden llevarse a cabo, desde senderismo hasta rutas a caballo o excursiones concertadas guiadas por expertos para llegar a los rincones más fascinantes del parque.