Hotel Monasterio de Sant Marçal, un lugar predilecto en el Montseny para desconectar entre muros milenarios. Inter duo Montis Signa, ad principium fluentis Tordariae (Entre dos montañas de referencia, en el nacimiento del río Tordera). Entre los macizos de les Agudes y Matagalls, en Font Bona —donde nace el río Tordera—, encontramos el monasterio de Sant Marçal, una ermita románica que se mantiene en pie desde los tiempos de la reconquista, cuando el primer fundador del cenobio, el monje Guifredo, fundó una pequeña congregación que con el paso del tiempo adquirió fama de santidad y de espiritualidad. A lo largo de su ya dilatada historia, sus muros han albergado benedictinos, cofradías y congregaciones. Hoy, es un hermoso hotel de paz y contemplación en el que los inquilinos, además de respirar el aire fresco y saludable del Montseny, se adentran en una atmósfera de recogimiento.