Este hotel está ubicado en una antigua finca rodeada por un pinar y a tan sólo 14 kilómetros de la abrupta costa. Gracias a su ubicación única, sobre una peña junto al mar, el huésped podrá disfrutar de la paz y tranquilidad de la naturaleza que lo rodea. El hotel le ofrece acceso directo a una pequeña bahía, a la que podrá llegar mediante una escalera de caracol esculpida en la piedra de la peña. Recorriendo un camino junto al mar, se encuentra Canyamel, con tiendecitas, cafeterías y restaurantes (a 500 metros). A 800 metros hay una parada de transporte público, también muy fácil de alcanzar andando. La playa está a 200 metros. El tiempo de traslado hasta el aeropuerto de Palma de Mallorca es de 60 minutos, ya que se está situado a 70 kilómetros. Esta casa rural abrió sus puertas en marzo del 2005 y está compuesta por dos edificios con más de 140 años, que se rehabilitaron y ahora forman parte de un moderno hotel con 18 habitaciones. Cuenta con un hall de entrada y un área de recepción abierta las 24 horas del día, caja fuerte, servicio de cambio de divisa, un guardarropa, servicio de alquiler de bicicletas y un sótano para guardarlas. Asimismo, todo el edificio está climatizado. En el salón de verano podrá disfrutar del bar, además, también tiene a su disposición un salón con chimenea y una acogedora cafetería. Deleite a su paladar en el comedor para desayunar o en el restaurante climatizado con sillas altas para los niños, terraza y vistas al mar. Para redondear todas las instalaciones y prestaciones, se le ofrece servicio de habitaciones, de lavandería y de atención médica, así como una terminal de Internet y un aparcamiento.