El hotel está situado en el lugar más tranquilo y apacible que ofrece la isla, cerca del volcán y en la parte superior de Caldera. Cuenta con el privilegio de ofrecer a sus huéspedes impresionantes vistas en todas direcciones. El complejo cuenta con arquitectura Cíclada y una piscina al aire libre desde donde se puede disfrutar de la maravillosa puesta de sol. El hotel ofrece habitaciones cómodas y bien equipadas con amplios balcones con espectaculares vistas de la región. Un entorno tranquilo lleno de belleza natural y un alojamiento confortable hacen de este hotel el lugar perfecto para unas vacaciones relajantes.