El hotel está situado en el centro histórico de Viena, frente a la Catedral de San Esteban. Hay varias tiendas a poca distancia andando y el aeropuerto internacional de Viena dista aproximadamente 20 km. El hotel fue edificado en el año 2006. El alojamiento ofrece 43 habitaciones. En cuanto a opciones gastronómicas, el hotel cuenta con un restaurante, un comedor, una sala de desayunos, una cafetería, un bar y un pub. Los huéspedes que lleguen en coche pueden dejarlo en un garaje (por un cargo extra). En las habitaciones hay aire acondicionado, calefacción central y un cuarto de baño. En la mayoría de las habitaciones es posible disfrutar de las vistas desde un balcón. El establecimiento dispone de una piscina. Una terraza invita al descanso.