Este encantador hotel de playa goza de una ubicación idílica en la Costa Brava. La propiedad está situada a escasos 200 metros de una playa de fina arena, mientras que el animado centro de Rosas se encuentra a tan sólo 2 kilómetros. En el centro de la localidad, sus huéspedes encontrarán una gran cantidad de comercios, restaurantes y bares, además de una divertida y variada vida nocturna que, sin duda, animará las noches veraniegas. Las instalaciones lúdicas del hotel complacerán a los huéspedes de todas las edades y su completo programa de animación de temporada incluye diversas opciones musicales para las noches.